La ortodoncia invisible es uno de los tratamientos más demandados en Odontología en los últimos años. Permite corregir algunos problemas bucodentales con una calidad estética muy alta durante todo el proceso. Y son mucho más cómodos para el paciente que la ortodoncia tradicional. Ahora bien, ¿la ortodoncia invisible es apta para todos los pacientes? ¿Cuáles son sus ventajas? ¿Cuánto tiempo dura el tratamiento? Sigue leyendo y te contamos todo lo que debes saber de la ortodoncia invisible.
¿Qué tipos de ortodoncia invisible hay?
Cuando hablamos de ortodoncia invisible, la mayoría de los pacientes visualizan los alineadores transparentes. Aunque esta es la opción más frecuente, no es la única. De hecho, existen muchos tipos de ortodoncia invisible, aunque de manera general podemos hablar de dos: aparatos fijos y aparatos removibles. No obstante, aquí vamos a explicarte los más frecuentes:
Brackets de cerámica o zafiro
Son los más similares a los aparatos tradicionales. La única diferencia es que gracias al material con el que están hechos, cerámica o zafiro, el color se asemeja al esmalte natural del diente. Aunque no son del todo invisibles, porque se colocan sobre la parte externa del diente, sí que ofrecen un buen resultado estético durante todo el tratamiento.
Ortodoncia lingual
Es más similar a la ortodoncia tradicional, solo que los brackets son más finos y se colocan en la parte interior de los dientes, de manera que no se aprecian a simple vista. Se puede utilizar para resolver prácticamente cualquier maloclusión, aunque su uso es más frecuente en adultos.
Alineadores transparentes
Se trata de unas férulas, transparentes y hechas a medida para cada paciente. Son los más demandados, especialmente entre la población adulta, pero tienen más limitaciones a la hora de corregir algunas maloclusiones. Son ideales para tratar problemas como un mal alineamiento, dientes apiñados o separados, sobre mordida o mordida cruzada, entre otros. Además de la estética, ofrecen otras comodidades para el paciente, como poder retirarlos para comer sin tener que prescindir de ningún alimento, como sucede con la ortodoncia tradicional. Eso sí, es fundamental llevarlos puestos al menos 22 horas al día para que el tratamiento tenga el efecto deseado.
¿Cómo saber qué tipo de ortodoncia es la más adecuada en tu caso? La respuesta es sencilla: acude al ortodoncista. Para poder determinar qué tipo de tratamiento es mejor para ti y para tu sonrisa, es necesario llevar a cabo un estudio previo personalizado, para valorar las características y necesidades de cada paciente.
Ventajas de la ortodoncia invisible
La principal ventaja de la ortodoncia invisible es la estética. Sin embargo, hay diferencias según el tipo. Aquí te hacemos un pequeño resumen de ellas:
- Estética. Si lo que quieres es que parezca que no llevas ortodoncia, la opción más adecuada son los alineadores transparentes y la ortodoncia lingual. Aunque los brackets de zafiro y de cerámica tienen un color similar al esmalte natural, lo cierto es que ambos llevan un arco metálico visible, por lo que no ofrecen tanta calidad estética.
- Tiempo de tratamiento. Aunque cada paciente es diferente, lo cierto es que de manera general, podemos decir que el tratamiento con brackets suele durar entre 18 y 36 meses. Sin embargo, los alineadores transparentes ofrecen un proceso más breve, de unos 7 meses.
- Comodidad e higiene. De nuevo, los alineadores transparentes son la mejor opción. Se realizan a medida para cada paciente, por lo que el ajuste en boca es muy preciso. Además, se pueden retirar durante las comidas, lo que facilita la higiene. Los brackets, sean linguales o superficiales, no se pueden retirar durante el tiempo de tratamiento y requieren un proceso de limpieza más exhaustivo y detallado.
Si quieres saber más acerca de la ortodoncia invisible, no dudes en consultarnos. Nuestra experta, la Dra. Victoria Pazos, estará encantada de resolver todas tus dudas.