El bruxismo, hábito de rechinar o apretar los dientes, es una condición que afecta a una gran parte de la población. Aunque puede ocurrir tanto de día como de noche, es durante el sueño cuando es más prevalente y, a menudo, puede pasar desapercibido. Este problema puede tener serias repercusiones en la salud bucodental, y es fundamental entender sus efectos para tomar las medidas preventivas necesarias. En este artículo te contamos cuáles son los efectos del bruxismo en la salud bucodental y cómo puedes prevenirlos. ¡Sigue leyendo!
Desgaste dental
Uno de los efectos más evidentes del bruxismo es el desgaste dental. La fricción constante entre los dientes puede causar un desgaste significativo del esmalte, la capa protectora externa de los dientes. Con el tiempo, este desgaste puede causar sensibilidad dental, caries y, en casos severos, a la fractura de los dientes. Además, los dientes desgastados pueden afectar a la estética de la sonrisa.
Dolor mandibular y cefaleas
El bruxismo no solo afecta a los dientes, sino también a la musculatura y a las articulaciones de la mandíbula. Muchas personas con bruxismo experimentan dolor en la mandíbula, rigidez y dificultades para abrir y cerrar la boca. Este esfuerzo excesivo también puede desencadenar cefaleas, especialmente al despertar. El dolor crónico puede influir negativamente en la calidad de vida, afectando al sueño y al bienestar general.
Problemas en la articulación temporomandibular (ATM)
La articulación temporomandibular (ATM), que conecta la mandíbula con el cráneo, puede sufrir daños debido al bruxismo. La presión constante y el movimiento repetitivo pueden causar la disfunción en la ATM provocando dolor, chasquidos o clics al mover la mandíbula y, en algunos casos, su bloqueo. Este problema puede requerir tratamientos especializados para aliviar los síntomas y restaurar su funcionalidad.
Erosión de empastes, prótesis y carillas
Para aquellas personas que tienen empastes, coronas, carillas o prótesis dentales, el bruxismo puede acelerar su erosión. La presión y el desgaste constante pueden debilitar y dañar las restauraciones dentales, reduciendo su vida útil y requiriendo reparaciones o reemplazos frecuentes.
¿Cómo se trata el bruxismo?
Afortunadamente, existen varias opciones para tratar y prevenir los efectos del bruxismo. Las férulas de descarga son uno de los métodos más comunes y efectivos para proteger los dientes durante el sueño. Además, las técnicas de relajación y el control del estrés pueden ser útiles para reducir el hábito de apretar o rechinar los dientes. En algunos casos, también puede ser necesario el uso de medicamentos para aliviar el dolor y la inflamación.
Si sospechas que podrías estar sufriendo de bruxismo o experimentas alguno de sus síntomas, te aconsejamos que te pongas en contacto con nosotros para evaluar tu caso y evitar que pase factura a tu sonrisa.